6.10.14

XVII TRAVESIA DE RESISTENCIA DE LA SUBBETICA CORDOBESA.

Magnifico día que nos ha hecho pasar el Grupo  de Montaña  La Tiñosa, en su XVII  TRAVESIA DE RESISTENCIA DE LA SUBBETICA CORDOBESA.
Todo empieza a las 3:10 cuando suena el despertador, ¿pero dónde vas?  A andar 60Km  ¡¡tú estás loco¡¡. La verdad que no era el único loco, ya habíamos quedado un grupo de pretorianos del club, para desplazarnos al polideportivo de Cabra. A eso de las 5:00 horas iniciamos la marcha, y como era de esperar en Cabra, del tirón de visita a la Ermita, bueno casi, nos quedamos en el carril de entrada a la Nava, fueron 6.7 km de subida, casi sin aliento, todo el mundo callado, solamente escuchabas el sonido del derrape de las botas por el pedregal. Cada uno con frontal, una estampa única de una fila de lucecitas, de romería por la sierra de Cabra.

Cruzamos toda la Nava dirección Zuheros, el frío apretaba después de la subidita, ya empezaba a clarear, podíamos vernos las caras, y el paisaje, espectacular. Cuando pasamos por Fuentefría, se me puso el bello de punta, en la última travesía de la Subbética que había hecho, me dio una pájara que me salvó mi buen amigo Joaquín. Pero bueno esa es otra batalla.
Ya en Zuheros, pude tomarme ese café que llevaba necesitando desde que me levanté, junto con las 2 lonchitas de “jamón” York, un poco justillas para el inmenso bollo.
Dirección Carcabuey, el sol y la humedad ambiental  apretaban, pero sin problema sacamos nuestras cremitas de protección solar, y palante. Desde La Fuente la Zarza hasta Fuente Bernabé una bajada muy bonita llena de vegetación y digna de ver con más detalle, pues aquí la gran mayoría de veces, tienes que estar pendiente de los palitos del vecino que no te salte un ojo.
Parecía que el tiempo iba acompasando el esfuerzo en la travesía, al entrar a Carcabuey para el almuerzo, cuatro gotas refrescaron el ambiente, después las nubes no dejaron de protegernos, parece que la peregrinación hizo efecto. Una paella y un gazpacho de espectáculo, que nos sirvieron y nos dejaron nuevos, para lo que se avecinaba. Una subida de 7 km hasta la Fuente Puerto Escaño, donde solamente el rutero Angel, Manuel Rambla, el presi y su ejército de pretoriano, aguantaron el tirón, bueno… y las nubes que no nos abandonaron.
Hasta ahí fenómeno, pero venía la bajadita un poquito jodidilla, o como me dicen, una “bajada técnica”, algún montañero se sentó donde quiso…., en mi caso puse la mano en una piedra que me dejo señalado. Esta bajada creo que no la olvidaré, quizás la parte más dura de toda la travesía.
A partir de ahí dirección Cabra, pasando Los Pelaos, allí nos llegaban recuerdos, de choricitos, lomitos, uhhuhh¡¡ Qué hambre¡¡.
Por Cabra pasamos por el barrio de la Villa, muy bonito, una zona que poca gente conoce, estaba engalanado con mantones de la Virgen de la Paloma, la gente parecía que estaba de Semana Santa, nos miraban asombrados, hasta fuimos testigos de una boda. Así iríamos que una mujer mayor nos daba el paso, “déjalos, pobrecitos que llevan andando desde las 5 de la mañana”.

 Lo mejor los aplausos cuando entramos al pabellón, algo que reconforta del esfuerzo realizado.  En definitiva un día magnifico que disfruté de mis compañeros de fatiga.

2 comentarios:

El presi. dijo...

Jajajajaja........ La virgen de la Sierra, no de la Paloma jajajajaja.... Y la bajada cierto muy técnica y peligrosa, pero los montañeros no se caen, se sientan donde quieren.

El presi. dijo...

Jajajajaja........ La virgen de la Sierra, no de la Paloma jajajajaja.... Y la bajada cierto muy técnica y peligrosa, pero los montañeros no se caen, se sientan donde quieren.